--- Nunca pensé que alguien lo leería, queridos blogeros!...---
Caminaba junto al estrecho camino que pretendía encontrarse con el río. Cada cierto número de pasos el camino se hacía aún más estrecho y se acercaba más a la orilla, me pregunto, cuántas personas recorrieron este sendero y procuraban no resbalar aunque era el mismo sendero el que los conducía cerca de las aguas que corrían. Era maravilloso el imaginar que las figuras trazadas por huellas, ramas caídas y hasta rastros de animales, otorgaban a este trecho de tierra una historia tan propia y compleja. Quizá nadie se había detenido a admirar lo sabia que era la ruta cerca del río, porque entre sus maravillosas curvas y asoladas depresiones, el espíritu de aquel camino hablaba a todos.
Es cierto, el camino estaba enamorado del río que corría junto a él, tal vez se enamoró de su voz, cuando el viento se acechaba, era el río quién advertía a quiénes pasaban cerca que una tormenta se aproximaba, pero cuando la tranquila mañana despertaba, las aguas apaciguaban el lugar, cantándole a su amor el sendero, el amor que le era recíproco. Pero más allá de su voz y de su bondad, el río era el compañero único del camino de tierra, eran muchos los que venían e iban, para todos era indiferente, pero los dos no se separarían, aunque nunca juntos, siempre se acompañarían, nada alejaría al río y al sendero.
Y su amor era tan grande que no escatimaron sacrificar ciertos deseos propios del cariño, la soledad no los atormentaría porque aunque jamás lleguen a encontrarse, caminar, corren, y se mueven juntos. La distancia que los separa, los une al mismo tiempo, porque el seco sendero de tierra es, siempre y cuando no se mezcle con el agua del río y pierdan su inocencia, su esencia.
Su amor es incondicional, el uno trae a transeúntes para que conozcan al maravilloso riachuelo, y los susurros del otro permiten que el sendero no sea olvidado. Y de eso se trata el amor, de compartir, de llenarse de alegría con diminutos detalles, de aprovechar el espacio (porque podría ser mayor), y de ajustarse al rumbo del otro, eternamente, o hasta que llegue al mar.
lunes, 19 de febrero de 2007
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10 comentarios:
la otra ful amor asi... pero bueno dice un par de cosas muy ciertas... bien ah!! darase una vueltita por mi quiosco!!
jaja de ley. ya acostumbrado a leer blogs inmersos en oscuridad y senderos de lodo, tristesas, etc.. una lectura como dice el pancho "la otra ful amor asi" se siente bien chistoso.. jaja unque me gusta la parte de la esencia.. hum arreglaras el link a mi pagina.. se te quiere chaos
In the middle of the night
I go walking in my sleep
From the mountains of faith
To the river so deep
I must be lookin' for something
Something sacred I lost
But the river is wide
And it's too hard to cross
even though I know the river is wide
I walk down every evening and stand on the shore
I try to cross to the opposite side
So I can finally find what I've been looking for...
Buen post para ilustrar al río.
Como muchas veces en el amor, a veces no se tiene, pero la pura esencia es suficiente.
no conocía ese lado poético tuyo gor!! jaja.. no en serio, está bien bonito no vea
aY CaRaY.... Me SoRPRenDio VeR 6 CoMMeNTaRioS eLe!!... GRaCiaS VeaN... a LoS Q FaLTaN SeR LiNKeaDoS DiSCuLPeN LaS DeMoRaS... Ya Lo eSTaRaN...
Es que se creeeeeeeeeeeee....
... enamorada...
Jajaja
hola...te puedo consultar algo?
que es la Follie?
Me lo podrias contar en otro post en mi blog?
El hecho de que llegue al mar indica que de alguna manera se separan... muy bonito la verdad, aunque la ultima parte me parecio limitante; tratar de darle un significado al amor...
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